Madrugada del día 11, 00:35

Hoy es mi cumple, y por lo tanto, ayer a la noche a partir de las 00:00 oficialmente también. Algo ya me olía yo, pero no sabía muy bien que era.

El traer a nuestra cocina a Fernando era solo una encerrona que me habían preparado tod@s estos cabron@s. Al llegar a la cocina, me cantaron el “Cumpleaños Feliz”, incluidos los internacionales!!

Tengo hasta una corona propioa, en la que pone: “Gure Erregea” (Nuestro rey). Que grandes!! Eso si que no me lo esperaba!! Fue un detalle que me gusto mucho la verdad. Otra de las cosas que me impresiono fue el dibugo que hizo Alyna, sinceramente, el dibujo se parece un huevo a mi...

                                 

 

Pero eso no era todo!! Me regalaron también dos botellas: una de vino y una de un licor escandinavo. Yo había comprado dos botellas de vino y de coca-cola para hacer Kalimotxo a la tarde, pero era la ocasión perfecta para sacarlas.

Éramos bastantes, y además estuvimos jugando a “Marcianito”. Un juego en el que tienes que ir llamando a los demás marcianos, y el que no se entera, pues le toca beber. Estuvo muy bien, la pena fue que acabamos pronto con el Kali. Era hora del licor escandinavo. Nos llego para llenar el vaso hasta la mitad y poder seguir con otro juego parecido al marcianito.

                          

Pero lo mejor estaba por venir, ya que en ese momento, los ucranianos decidieron sacar algo que para ellos es como el agua: Vodka ruso. Nos dio para un txupito para casi todos los presentes, y alguno que repitió (un servidor entre ellos, no todos los días se puede beber Vodka original ;) ).

Conclusión: el vodka ruso original no tiene nada que ver con las mierdas que se compran en el Eroski, ni Absolut, ni Eristoff ni nada.

Estaba claro que había que beberlo de txupito. Nos recomendaron que nada más beberlo nos tomásemos coca-cola o Sprite, pero al no haber para todos, al final nos decantamos por un limón.

El vaso olía fuerte, pero al tragar no me dio la sensación de querer morirme que dejan los txupitos de vodka de casa. Eso si, el limón vino que te cagas. Lo dicho, ni comparación.

Después de una gran noche que acabo a las 4 de la mañana, ya era hora de irse a la cama. :)