lunes, 30 de septiembre de 2013

Norway in a nutshell fjord trip

Como ya he mencionado en el anterior post, ama y aita han venido a pasar unos cuantos días a Bergen. Aparte ver la ciudad, si vienes a Noruega, tienes que ir a ver un fiordo sí o sí. A ver, haber hay muchas excursiones, y a muchos fiordos. Nosotros, nos hemos decidido por hacer el Norway in a nutshell

Es una excursión de más de 10 horas, y aunque no es muy barata, merece la pena. Todo el recorrido se hace en distintos medios de transporte: bus, tren y barco, gracias a los cuales visitas distintas ciudades y pueblos, aunque eso sí, mucho tiempo no tienes entre una cosa y otra para verlas. Además, hemos tenido suerte, y el tiempo que nos ha hecho ha sido increíblemente bueno, así que hemos podido disfrutar de todo el viaje sin ningún problema. Yo creo, que como pilles un día de lluvia, no lo disfrutas ni la mitad.

Tengo que decir también, que todo, absolutamente todo, estaba lleno de txinos, japoneses o lo que sean, madre mia... que pesad@s!! Mira que yo saco fotos a todo... pero lo de ell@s es demasiado!!! ¿¿Como narices les dura la batería?? ¿¿Alguien me lo explica??

Bergen-Voss en tren.

La primera hora del viaje se hace en tren. Hemos cogido el tren a las 8 40 de la mañana en la estación de trenes, así que, nos ha tocado madrugar. Yo este trayecto ya lo hice en mi viaje a Trolltunga, así que sabía en que parte del tren hay que ponerse para tener mejores vistas: en la izquierda. Con esta vez, el camino Bergen-Voss ya lo he hecho unas 7 veces, entre coches y tren, así que, tampoco he descubierto gran cosa. Eso si, es muy bonito.



Voss-Gudvangen en Bus 


El siguiente tramo dura también una hora más o menos. Es un recorrido muy bonito, además el chofer te va indicando lo que vas viendo, que si este pueblo se llama no se como, y este lago así... Eso si, todo en inglés y noruego, así que, en algunas partes del trayecto me ha tocado hacer de traductor. ;)


La parte más bonita ha sido cuando hemos llegado a un valle. Increíble!!! Además, había dos cataratas enormes a cada lado de la carretera. Menuda carretera!!! Todo zig-zag y super estrecha!! Con decir que la cierran en invierno por el peligro que supone...


 




Fjord cruise Gudvangen-Flåm

Ahora viene la parte más bonita del viaje, ya que es cuando coges el bote para ir por el fiordo hasta Flåm. Eso sí, resulta que desde que te deja el bus hasta que coges el bote, hay una diferencia de unos 30 minutos, y casualidades de la vida, hay una tienda enorme de souvernirs. Menuda coincidencia!! Nosotros no hemos comprado nada... por lo menos en esta.

                            

Nos hemos montado en el barco, y hemos subido para arriba. Menudo fresco que hacía, no hemos tenido más remedio que tomarnos un “Relaxing cup of chocolate” para entrar en calor!!! ;) Una vez que se ha empezado a mover el barco, los paisajes que vas viendo son increíbles la verdad. Como he mencionado por arriba, el tiempo nos ha acompañado, y aunque hacía bastante fresco, hemos podido todo gracias a que estaba despejado, y hemos podido flipar con los alrededores, viendo las fotos, tampoco hay mucho más que añadir:




















The Flåm Railway Flåm-Myrdal





Lo primero que hemos hecho cuando hemos llegado a Flåm ha sido comer, que ya era hora. Hay una opción que solo estas como media hora en Flåm antes de coger el tren para Myrdal, pero nosotros nos hemos quedado algo más. En ese tiempo, nos hemos sacado un par de fotos por lo alrededores y hemos entrado en una de las tiendas de souvenirs. Esta vez, hemos caído y hemos comprado unos cuantos trolles y así para llevar a la family. En la tienda también había escudos, cascos y hachas vikingos, y no he podido resistirme a la tentación de disfrazarme... :)






En Flåm se puede entrar gratis al Flåm Railway Museum. Es pequeñito, pero te cuenta la historia, y hay fotos antiguas. No está mal.

Volviendo al tren. Por lo que dicen, el recorrido que hace este tren, es uno de los más bonitos de todo Noruega, y desde luego, no defrauda. Conozco gente, que ha hecho este recorrido andando, Flåm-Myrdal, unas cinco horas o así creo, y es más bonito todavía. Tarda una hora, pero hay que decir, que no va a más de 20 km/h, así que, ves todo muy bien:









Antes de llegar a Myrdal, hace una parada en una catarata increíble, un poco más y tenemos que pelearnos con los chinos para sacarnos una foto. :O





Train Myrdal-Bergen

El último tramo de la excursión, que dura dos horas. La verdad, es que no hemos hecho mucho caso al trayecto, ya que íbamos a lo nuestro. Estar casi 10 horas de aquí para allá se nota, y aunque sí que era muy bonito, hemos ido repasando toda la excursión, y viendo las fotos. El tren ha parado en Voss, y como teníamos unos 30 minutos hasta que llegara el tren para Bergen, hemos ido al lago que está en el centro de Voss.

 


Conclusión

Es una excursión algo carilla, y bastante larga, pero merece la pena hacerla. Visitas distintos sitios, el crucero por el fiorde es increible!!!



domingo, 29 de septiembre de 2013

Comida en el Mercado de Pescado

Ama y aita han venido a pasar unos días por aquí, así que era la ocasión perfecta para ir a comer al tradicional mercado de pescado de Bryggen. Después de subir el Floyen y dar un par de vueltas por las casitas de Bryggen, las tripas rugían, así que era hora de comer.

Se podría decir que hay dos tipos de mercado. Por un lado, esta el mercado que ponen en la calle, típico de turisteo. Este mercado es prácticamente temporal, por lo menos la mayoría de los puestos, ya que en cuanto termina la época de las visitas de los turistas, es decir, ahora, la mayoría de puestos se cierran.

Cuando vine, es decir, a principios de agosto, el muelle en el que se ponen, estaba lleno de puestitos, pero ahora, a finales de septiembre, cada vez quedan menos.

Por otro lado, esta el mercado de pescado que está debajo del turist office. Que yo sepa, este está abierto todo el año, y ofrece productos muy frescos. Nosotros hemos comido aquí.

Aparte de puestos donde puedes comprar distintos tipos de pescado y marisco, la mayoría de ellos, son
también restaurantes. En nuestro caso, hemos comido en el último de ellos. Para picar, hemos pedido un plato de gambas. Estaban muy ricas, pero para lo que hemos pagado era una ración bastante grande.

De segundo, los tres nos hemos decidido por el salmón. El plato estaba compuesto por salmón claro (tenía como unas hierbitas encima), patatas cocidas y una medio ensalada. Nada que ver con el salmón que me compro todas las semanas y que hago al horno. Ojo!!! Esto no quiere decir que me quede mal eeee!!!! ;)



Es decir, que se come bien y los platos no es que sean pequeños, pero hay tener preparada la cartera...

sábado, 28 de septiembre de 2013

De hiking en Sandviksfjellet

Aprovechando el sol que no veíamos hace un par de días, nos hemos decidido por subir la cuarta montana de Bergen.



Esta vez solo hemos ido Sasha, Mario y yo, porque entre una cosa y otra los demás se han rajao.

No sabíamos muy bien como llegar, ya que lo hemos mirado por Google Maps. Sabíamos dónde bajarnos más o menos, y luego que había que tirar parriba.

Así que eso ha sido lo que hemos hecho. Eso si, durante 10 mins, porque luego hemos decidido preguntar. Bueno, pues después de media hora hemos llegado a donde se empieza a subir la montana: la escalera de piedras. 

En total se tarda como una hora en subir y bajar. Que poco no?? Pues no. Las escaleritas de las narices cuestan, porque el que sean escaleras, no significa ni que sean regulares ni.que no tengan pendiente. Así que, ahí hemos subido, sin prisa pero sin pausa. Mientras tango, los noruegos corriendo escaleras arriba y abajo. La verdad es que sigo flipando tanto como el primer día, todo el dia corriendo y haciendo hiking.

 

Una vez que llegas arriba tienes unas vistas increíbles de Bergen la verdad. Habremos estado como 20-30 minutos arriba haciendo el reportaje fotografico correspondiente, y luego vuelta para abajo.









En bajar hemos tardado otros 25 minutos, pero todavía nos faltaban otros quince hasta llegar a la parada de bus. Increíble anochecer.

sábado, 21 de septiembre de 2013

Hasta Pronto Yulya!!!!

Hoy ha sido un día raro para todos los miembros de esta cocina: Yulya, la novia de Mario, se volvía para Rusia. Cogía el avión a las 6 de la mañana. Se han marchado de la cocina alrededor de las tres en dirección al aeropuerto. 

Por supuesto, claro está, todos la hemos despedido. Las últimas horas después de cenar, las hemos pasado en la cocina tomando como no, un té. Tiene un viaje de unas 24 horas hasta llegar a casa, entre escalas etc., así que aunque ayer era el último día que pasaba aquí con nosotros, la despedida la organizamos el día anterior, osease, el jueves por la noche.

Como siempre, toda la despedida la organizamos el miércoles por la noche. Entre una cosa y otra, acabamos a las dos de la mañana de preparar medianamente todo para el día siguiente. Se nos ocurrió hacer una especie de Gincana por Fantoft y alrededores, comprar un par de regalitos de recuerdo, y hacerle un “plof” (Explicaré más adelante lo que es).
Rosa y yo fuimos por la mañana a Bryggen, a los puestitos que hay por allí, así como a las tiendas de souvenirs. A nosotros nos tocó tener que comprar un mini-troll, una pulsera y una taza de recuerdo. Nos recorrimos todos los puestitos y tiendas, en busca de lo que se conoce como: “bueno, bonito y barato”. Esta última palabra mejor la olvidamos por Noruega y la cambiamos por: “bueno, bonito y poco caro”. Así que, después de analizar precios nos pusimos a ello. La verdad, es que no nos salieron muy caros los artículos. El precio no lo voy a poner, que Yulya entiende el español tan bien como el inglés, así que, por si acaso...

La Ginkana
Nos hemos dividido en distintos puntos de Fantoft, y cada uno tenía una pista que la llevaba a la siguiente y un regalito. Hemos compinchado a Mario, aunque la verdad, el no sabía nada de la ginkana, solo tenía que estar con Yulya a las 8:30 en la habitación.

Le han tocado la puerta, y le han dado la primera pista. Tenía que ir a otro bloque en busca de la siguiente, y mientras tanto nosotros hemos tenido tiempo de ir a nuestros puestos. Allí le han dado también unas zanahorias, que como es vegetariana, pues para hacer la gracia. ;) De ahí ha tenido que ir al Meny (un supermercado que está aquí al lado). Allí, ha tenido que rebuscar entre los congelados, y ha encontrado la pista claro, y un una figurita de un troll.

Le tocaba ir al postbox ahora. Le hemos dado la llave de uno de los buzones, y dos pistas, para concretar algo más la búsqueda, porque si no la pobre puede estar años para probar la llave en todos los buzones. Una pulserita era el regalo.

Ahora tocaba la última prueba en la lavandería, que era donde estaba yo. Tenía que cantar tres canciones que tuviesen la palabra “Friend” en cualquier idioma. Ha cantado una en inglés, otra en castellano y la última en ruso. Ahora le tocaba buscar sus últimos regalos: una caja de Earl Grey Tea (está todo el día tomándolo) y un cartelito de autostop con todas nuestras firmas y dedicatorias. Mientras tanto, yo me he ido corriendo para la cocina.



Al llegar a la cocina, tenía un par de regalillos más:



Y para cenar comimos un “plof”. EL tradicional, es un arroz con carne, pero al ser vegetariana, pues se hizo un plof vegetariano, con zanahorias, campiñones, etc. Rico rico.



Fue una gran noche.






martes, 10 de septiembre de 2013

Trolltunga - The Troll's tongue

Resumen: 7 horas para llegar arriba, casi 5 horas para bajar, pasar la noche arriba en una tienda mientras llovía... no ha sido un fin de semana fácil la verdad, así que este post va pa largo. :O

Bueno, pues esta aventura comienza el viernes por la tarde, cuando algunos de los que no teníamos ticket para un crucero de estudiantes decidimos hacer algo especial. Y como sabíamos que Trolltunga lo cerraban en dos semanas, pues había que aprovechar.

Yo tenía saco, pero algunos de nosotros no, y tampoco teníamos tienda, así que fuimos al Tenants' Union para alquilarla. El TU es una “asociación de estudiante” por llamarlo de alguna manera en Fantoft, donde puedes alquilar cosas. Todavía no está totalmente en funcionamiento, así que, ya lo explicaré todo esto más a fondo en algún otro post.

La idea que teníamos en la cabeza cuando surgió lo de ir a Trolltunga era ir en auto-stop, pero viendo la distancia que teníamos que hacer y lo que se tarda en subir (habíamos leído por ahí que el viaje total eran 10 horas), declinamos la idea y nos decantamos por pagar.

Supongo, que después de haber visitado la mayoría de los sitios en este mes que llevo en Bergen por la cara, ya nos tocaba pagar. Total, que la ruta sería esta: coger un tren hasta Voss y después un autobús hasta Tyssedal.

El viaje duró unas tres horas, y por supuesto, algo nos tenía que pasar. Pensábamos que el viaje en autobús nos costaría unas 50NOK por ser estudiantes, pero la cara de idiotas que se nos quedo cuando el chofer nos dijo que eran 160NOK os la podéis imaginar. Aún así, el tío se portó, y nos cobró precio de niño, 101NOK.

Tyssedal es el pueblo que queda más cerca de Trolltunga. Pero claro, ese cerca es relativo, porque está a unos 3-4km aproximadamente, en otras palabras, una hora andando, en cuesta además. Como no podía ser de otra manera, no estábamos muy por la labor, así que nos pusimos a hacer autostop para subir para arriba. Un coche paró de la misma, en el que se metieron Rosa, Yulya y Mario, con la tienda y las mochilas que más pesaban. A Fernando y a mí nos tocó tirar parriba. Nos faltarían unos 20-25 minutos andando cuando nos paró un coche, y nos subió hasta arriba para unirnos a los demás.

Comenzaba la aventura de verdad. Tengo que decir, que Fernando y yo, ya llevábamos 50 minutos cuesta arriba en las piernas. Un pequeño calentamiento para lo que nos quedaba.

Para los primeros 1.7 kilómetros, hay dos opciones: subir por el camino 
(que de camino tiene poco,como ya veréis más adelante) o subir por las vías del funicular. Se supone que esta última opción no está permitida, pero todo el mundo sube por allí, así que, nosotros no íbamos a ser menos. A los lados de las vías hay unas escaleritas, y se puede subir sin ningún problema.La verdad, es que acabas de ellas hasta las narices. Por lo que he leído y encontrado por ahí, son más de 2000 y pico, sinceramente, cuando subes, no estás para contarlas.
 

Una vez que llegamos allí empezaba lo duro. Mario subió la tienda en las escaleras, así que ahora nos tocaba cambiar: era mi turno. La llevé como 1,5-2 km, pero como pesaba la jodida. Después de las escaleras, hay un tramo que es llano, pero luego ya empieza una cuesta, que es todo piedra. No es difícil de subir tampoco, pero lleva su tiempo, y si vas cargado pues encima más. La verdad, parecía que no, pero en ese punto ya estábamos cansados. Serían alrededor de las 2 o así.
 Allí nos encontramos con unos valencianos y un catalán de Fantoft, y estuvimos hablando un rato con ellos. Habían pasado la noche allí y ya se volvían para casa. Nos dijeron que era increíble, pero que les había llovido la última parte del camino, y que durmieron una cabaña que hay arriba. La verdad es que nosotros tuvimos suerte, y no nos ha llovido en todo el fin de semana, menos a la noche. No adelantemos acontecimientos

Una vez acabada la subida, hay un largo enorme, y luego unos paisajes increíbles... El camino, es todo el rato subiditas y bajaditas, pero con barro, etc... así que se hace bastante largo. Sinceramente, el paisaje no lo observamos tanto como a la vuelta, ya que no estábamos para ello. Decidimos seguir andando hasta que encontrásemos el cartelito de 4 km para llegar a Troltunga. Lo vimos, pero nos decidimos por seguir andando 15 minutos más, hasta las 16:15.

En ese parón comimos. En vez de comer en el camino, tiramos un poco para abajo, y acertamos de pleno. Creo que no he comido en mi vida en un sitio con estas vistas. Estábamos cansados, pero después de comer y de las vistas, recuperamos las fuerzas, algunas por lo menos. ;)

 


Seguimos andando, y andando, buscando los cartelitos que indicaban la distancia que quedaba para llegar como loc@s. Al final, vimos el de 1 km.

Al llegar quedas impresionado con lo que te encuentras... te deja de doler todo, y los 11 kilómetros que llevábamos encima y casi 7 horas (teniendo en cuenta el paseo desde Tyssedal y el tiempo para comer) de caminata merecieron la pena. Había otro grupo allí, que prácticamente llegaron a la misma hora que nosotros, así que para hacernos las fotos nos fuimos turnando.

Tengo que decir, que estaba ansioso porque llegara mi turno, y poder subirme a la lengua. Da más impresión desde fuera que cuando estas allí. Primero me saque la foto de pie, luego me atreví a tumbarme y mirar para abajo. Decidí, que eso solo lo iba a hacer una vez en la vida, así que, me senté en el borde y disfrute del momento como un niño:









Después de que todos nos sacásemos las fotillos, tocaba buscar un sitio donde poner la maldita tienda. Había una cabaña, pero éramos demasiados para poder dormir en ella, así que, nos decidimos por la tienda. Sinceramente, yo prefería la tienda para completar la aventura como dios manda. :)

Primeros problemas de la noche, no teníamos ni pajolera idea de como demontre montarla. Así que, empezamos a meter palos, buscar la puerta... y al final conseguimos montarla. Tardaríamos unos 20-30 minutos.

Fue acabar de montarla, y empezar a llover. Empezó flojito, pero a medida que iba entrando la noche, cada vez caía con más fuerza, acompañada de ráfagas de viento. Cenamos y nos metimos a dormir.

El sitio que habíamos elegido no era tan bueno como parecía, ya que tenía una pequeña pendiente, y nos escurríamos todo el rato para abajo. La verdad es que nos lo pasamos muy bien. Era un tienda para cuatro, pero éramos cinco + las mochilas. Así que si haces los cálculos sale:

5 PERSONAS + 5 MOCHILAS= APRETUJAMIENTO

Total, que cada vez que se movía uno, se movían los de al lado. Dormir, dormimos poco, porque entre el poco espacio, y el viento, que parecía que íbamos a salir volando... no ayudaba a conciliar el sueño.



Domingo

La lluvia habrá parado sobre las 6 de la mañana, así que hemos podido dormir un par de horitas antes de levantarnos. Yo me he despertado a las 8:30 de la mañana. He aprovechado para dar una vuelta por los alrededores, así como, para ir otra vez a Trolltunga y sacar un par de fotos más sin nadie por alrededor.

 






No voy a añadir nada más. Tanto las fotos como los videos hablan por si solos.

Una vez que nos hemos levantado todos, hemos recogido los sacos, la tienda y hemos desayunado el bizcocho y que habían hecho Mario y Yulya el día anterior. Madre mía que bueno estaba!! Nos ha entrado... puff!!!

 


Hemos recogido los bártulos y hemos empezado a bajar. Se dice que las bajadas son más rápidas, y la verdad es que sí. Íbamos a un ritmo increíble, hemos hecho los primeros 4 km en 2 horas. Además, esta vez, hemos podido contemplar el paisaje de manera más relajada:




Hemos hecho una paradita para comer, y hemos seguido para adelante. Hemos llegado al punto de las escaleras del principio, y según nuestro cálculos, nos faltaban unos 20 minutos de bajada tranquilita.
Pues estábamos totalmente equivocados. Nos quedaban 1,7 km de puro sufrimiento.


Tardamos alrededor de una hora en hacer esos casi dos km Todo estaba embarrado y lleno de piedras, así que, no era muy cómodo andar por esos caminos.Aún así, a mitad de camino encontramos una cascada increíble, en la cual, aprovechamos para quitarnos el barro de las botas.Lo del barro, era un punto importante, ya que ahora, nos tocaba hacer auto-stop para volver a casa.





Total, que tardamos en bajar desde Trolltunga 4 horas y 37 minutos. No está nada mal no??

Como he mencionado, el plan era volver a Bergen haciendo dedo. El primer paso, era bajar hasta el pueblo por donde pasan las carreteras. No ha sido difícil, ya que mucha gente bajaba pa abajo en coche, tras haber hecho el mismo recorrido que nosotros.

Al ser cinco, nos hemos divido en una pareja (Rosa y Fernando) y un trío (Mario, Yulya y yo). Hay dos opciones para volver a Bergen: La primera es ir de Tyssedal a Odda, y de Odda a Bergen, y la segunda, ir de Tyssedal a Voss, y de Voss a Bergen. Yulya y yo ya habíamos hecho auto-stop en Voss, y sabiendo que es fácil volver desde allí, nos decantamos por la segunda opción.

En un principio, hemos hecho sin cartel unos cinco minutos, pero luego, hemos decidido sacar el cartel de “Bergen”. Ha sido sacarlo, y parar un mercedes blanco bastante viejo. Nos dijeron, que ellos también iban para allí, así que, nos hemos metido encantados. Resulta que eran lituanos, y Yulya, siendo rusa, todo fue más fácil.

Tengo que decir, que el lituano, no es que condujera muy bien la verdad, pero nos ha traído hasta la residencia directamente, haciendo dos paradas de 5 minutos para estirar un rato las piernas. Estar 3 horas y 10 minutos metidos en el coche... te deja el cuello y la espalda pal arrastre.


En conclusión, es un viaje largo, duro y cansado, pero sin ninguna duda merece la pena ir hasta Trolltunga. Se lo recomiendo a todo el mundo.