Este fin de semana nos tocaba ir a
Troltunga. Para el que no lo sepa, es un lugar espectacular, que para
llegar se necesitan unas 5 horas de hiking, así que, el camino total
son unas 10. Por lo que, es necesario acampar por allí cerca. Según
el tiempo, iba a caer bastante fuerte, y añadiendo a esto que no
teníamos prácticamente nada preparado, decidimos dejarlo de lado la
noche del jueves.
Como siempre, no hay quien entienda el
tiempo de aquí, porque resulta que hoy ha hecho bueno, más o menos,
en vez de lluvia.
Teníamos un “Plan B” para el
sábado: una fiesta vikinga. Hemos cogido el bus dirección a
Herdla, numero 99. Hemos tardado aproximadamente una hora o así en
llegar. No sabíamos muy bien donde nos teníamos que parar, pero
íbamos acompañados de un tío que llevaba un arco, así que le
hemos seguido.
Ha sido una buena y mala elección. Me
explico: la feria no era por dónde él ha ido, sino literalmente
para la otra dirección. Lo bueno ha sido, que nos hemos encontrado
con un barco vikingo. Uno de los que estaba por allí, nos ha dicho
que estaba hecho de la manera tradicional. Desgraciadamente, era un
evento privado, y nos hemos quedado con las ganas de montarnos. :)
Total, que después de haber andado
como unos 15 minutos hemos llegado al mercado. Por el camino nos
hemos encontrado bastantes “sorpresas”, como se ven en las fotos
de abajo. Quitando la señal, las demás “sorpresitas” estaban
por toda la calle y la acera, ya que las vacas estaban sueltas!!! :O
No ha pasado nada, ellas a lo suyo, y nosotros a lo nuestro.
Para entrar al mercado había que pagar
20NOK. No era un mercado muy grande, la verdad, habría unos 8
puestos a lo mucho, y una tienda enorme donde vendían comida, té,
etc.
Todos los puestos, eran de artesanía, y había desde agujas
hasta cuernos, cuero y espadas de verdad, cunas y las míticas
lanzas, espadas y escudos vikingos de madera para los niños. Lo
admito, me hubiera comprado algo de esto último. ;)
También teníamos la opción de tirar
con el arco. He llegado hoy a la conclusión de que lo del arco no es
lo mío. Por lo menos el vikingo, ya que de txiki había tirado
alguna vez y no era tan malo... Aquí un rato largo ya nos hemos tirado.
No había mucho turista, y gente
tampoco sinceramente, así que una de las mujeres que había por allí
se nos acercó, y nos propuso jugar a unos juego vikingos. Nosotros,
como no, encantados. Jugamos a tres, lo siento, pero con los nombres
no me quede, así que me los voy a inventar:
- 1) El juego de las sillas, pero sin sillas y con un paloTe ponías alrededor de un palo y tenías que empujar a los demás, hasta que alguien tocara el palo. Ese queda eliminado y se vuelve a empezar. Casi gano!!! Pero el 1,2,3 de la última ronda me pillo despistado y acabé contra el palo en un ti-ta...
2) Lucha estilo petanca pero de dos
equipos
Nos hemos dividido en dos equipos.
Cada equipo tenía unos tacos en suelo, 5 exactamente, y en el medio
de los dos equipos un taco enorme, el “Rey”. EL objetivo del
juego es acabar con los tacos de los otros, y una vez hecho acabar
con el rey. Para tirarlos, teniamos unos palos. Que fácil no?? Pues
no, porque los tacos que se tiraban luego pasaban al otro equipo.
Como estoy seguro de que no lo habéis entendido, y yo no me se
explicar mejor, pues lo dejamos ahí... porque escribir a lo tonto y
leer para nada como que no. Lo único que sí que voy a decir, es
que mi equipo ganó las dos partidas. ;)
3)Rugby con pala
Este juego era un juego de brutos.
Había dos porterías, una especie de palas y una pelotilla de
cuero. Las palas solo se podían utilizar para meter gol, es decir,
que cuando llegabas a la portería cogías la pelota y le dabas un
palazo. Por lo demás, no había reglas. Así que imaginaros la que
hemos montado... Algunos han acabado con verdín en los pantalones y
seguro que con algún que otro moratón. :O Esta vez hemos perdido.
Después de los juegos, nos hemos
puesto a comer, que eso de hacer deporte nos ha dado hambre.
Estábamos comiendo alrededor del fuego, cuando ha caído un
txaparron encima que vamos... nos hemos metido en la tienda grande
para resguardarnos, junto a todos los demás noruegos. Habrá durado
como cinco minutos, y luego el sol otra vez. El tiempo de aquí es
imprevisible...
Hemos dado un par de vueltas más por
los puestitos, y luego nos hemos marchado del mercado. Pero no para
casa no, que seria de una excursión sin hiking?? Pues nada. Así que
hemos tirado por la costa, y hemos encontrado ruinas de algún búnker
alemán, así como antiaéreos. Ha estado guapo la verdad. No los
hemos podido disfrutar mucho, porque la hora del autobús se
acercaba, y el siguiente era dentro de 3 horas, y no veíamos mucha
cosa que hacer por allí, así que hemos cogido el camino para la
parada y a casa.
Unos rusos que había por allí hicieron este video, que podía ser un resumén de toda la chapa de aquí arriba.
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